Ballet en 2 actos
Coreografía y libreto: Georgy Koftun
Música: Vladimir Kachesov
Argumento
Con el sonido de las campanas la multitud se crea un nuevo Mal con la imagen del anciano Rasputin.
Al ser elegido como líder él la sume bajo su influencia. Gracias a su nata fuerza mágica, Rasputin, al conseguir salvar al hijo del zar de su enfermedad, sube al más alto escalón del poder. El ángel que protege a la familia del Zar intenta frenar la marcha del demonio, pero las fuerzas son están parejas.
El Parlamento no puede llevar la contraria al favorito de la familia del Zar. Los serviciales cortesanos inclinan sus cabezas ante él, pero guardan rencor. Al ver que todo le está permitido Rasputín invade las competencias del Parlamento y lleva una vida licenciosa habitual en orgías por todo San Petersburgo con prostitutas y hasta con las damas de alta cuna. El Zar no está contento con el anciano. Pero la Zarina le simpatiza ya que ha curado al hijo. Mientras el anciano está cerca, el niño está a salvo.
Rasputin disfruta de poder y veneración, mientras que, cada vez más, hunde el país en caos: aconseja al Zar entrar en una guerra que al final se pierde, y con esto empeora el nivel de vida en Rusia y la situación fuera del país. Nobles y generales, pierden la paciencia. Por la salvación de Rusia crece un complot contra Rasputin; éste, en su ira borracha, no hace más que ofenderles y humillarles.
Presintiendo la llegada de la catástrofe, tranquiliza sus miedos e iras en borrachos alborotos, libertinajes, tanto en tabernas como en Palacio. Mientras, la salud del hijo del zar empeora. La Zarina pide a Rasputin que siente la cabeza. Él intenta ayudar al zarevich, pero pronto todo vuelve a su desenfreno.
La paciencia se ha agotado. Rasputín cae en la trampa de los conspiradores y muere.
La familia del Zar esperaba su salvación con la ayuda de Rasputin, pero es la sombra del anciano quien los lleva al otro mundo. ************************************************************************************************************************************************************************************************************************************* ********************************************************************************************************************************************************************************************************
Ballet La Cenicienta |
Basado en el cuento popular de Charles Perrault.Originalmente llamado "Cendrillon ou la petite pantoufle de verre" (Cenicienta o la pequeña zapatilla de cristal). El ballet fue estrenado en el año 1945. Se divide en tres actos con música de Sergei Prokofiev. El argumento atrajo a Marius Petipa, cuando faltaban sólo siete años para concluir el siglo XIX. La obra, titulada como el cuento alusivo, tuvo la inhabitual coreografía de tres importantes figuras: el propio Petipa, Lev Ivánov y el maestro de baile italiano Enrico Cecchetti. Fue estrenado en el Teatro Mariinski de San Petersburgo. Acto I. En casa de Cenicienta Khudyshka y Kubyshka, hermanastras de Cenicienta, reciben las invitaciones para el baile de disfraces organizado en el castillo. Ambas se burlan de Cenicienta, que no ha sido invitada, por ser considerada la sirvienta de la casa. Las hermanas bordan un chal para usar esa noche, mientras Cenicienta permanece en la cocina. Como de costumbre, las hermanastras comienzan a discutir, y rompen el chal en dos. Se van, dejando sola a Cenicienta, que se dispone a limpiar la habitación. Al ver los trozos del chal, comienza a bailar, pero pronto recuerda que ella no está invitada a la fiesta. Su tristeza le trae el recuerdo de su madre: de ella conserva un par de zapatos y un avellano que le pidió plantar antes de morir y que, desde entonces, cuida con amor. Llega su padre y trata de consolarla, pero cuando la madrastra regresa de comprar lujosas ropas para el baile, ataca a su marido e insulta a Cenicienta en un acceso de ira. La joven queda sola, obligada a los quehaceres de la casa. Aparece una mendiga, pidiendo comida y limosna. Cenicienta la invita a entrar y le ofrece un delicioso caldo. Al verle los pies desnudos y lastimados, con bondad y humildad, los lava y los cubre con los zapatos que le dejara su madre. Empiezan los preparativos para la gran fiesta: llegan el maestro de corte y un músico, para instruir a las damas en las danzas cortesanas. Cuando todo está listo, parten dejando sola a Cenicienta. La joven comienza a bailar y a hacer reverencias, imaginándose junto al príncipe, pero pronto vuelve a sentarse, desanimada. De pronto, aparece nuevamente la mendiga y, transformándose en un Hada, le promete a Cenicienta hacer realidad sus deseos. En agradecimiento a su bondad, le obsequia a la muchacha un par de zapatos de cristal y convoca a las hadas de la primavera, el verano, el otoño y el invierno, con sus séquitos de flores, mariposas, luciérnagas, libélulas, saltamontes, quienes le traen vestimentas y adornos para el baile. Antes de partir hacia el castillo, el Hada madrina le advierte que debe regresar antes de las doce de la noche, y la conduce al gran reloj. De él salen seis enanitos guardianes, quienes le indicarán con su fanfarria el momento de abandonar el castillo. Acto II. El baile de disfraces. Los invitados llegan al castillo y bailan danzas de corte. Llegan los cuatro amigos del príncipe acompañados de dos damas y, poco después, ingresan la madrastra, sus hijas y el padre de Cenicienta. Khudyshka y Kubyshka se comportan groseramente. Cuando el príncipe hace su entrada, todas las damas intentan atraer su atención. El maestro de corte anuncia la llegada de Cenicienta, que aparece acompañada por las Hadas, sus pajes y los demás seres fantásticos. El Príncipe no puede apartar su mirada de ella y le pide que baile con él. Los invitados se preguntan por la identidad de la hermosa muchacha qua ha despertado tanto interés en el príncipe. Un lacayo le alcanza a la joven tres naranjas, frutas altamente apreciadas en el reino, consideradas como el regalo más delicado que se le puede hacer a una doncella. Ella las acepta, pero las entrega, generosa, a sus hermanastras, que no la han reconocido. Como de costumbre, las jóvenes discuten para quedarse con la mejor y más colorida. Cenicienta y el príncipe se declaran su amor. La fiesta continúa. Cuando las doce campanadas anuncian la medianoche, el Hada, nuevamente vestida de mendiga, busca a Cenicienta. Aterrorizada, la joven huye del castillo, seguida por los enanitos y las demás figuras que conformaban su séquito. El príncipe corre tras ella, pero sólo encuentra el zapato de cristal que la joven perdió en su huida. Acto III - Escena I El príncipe desea encontrar a la dueña del zapato, y convoca a los zapateros del reino. Los zapateros su muestran perplejos: no pueden descifrar quién lo fabricó ni a quién pertenece. El príncipe decide entonces partir él mismo en busca de la joven.- Escena II - Escena III En su hogar, Cenicienta piensa que todo ha sido un sueño. Sólo el zapato que escondió en su delantal le recuerda lo ocurrido la noche anterior. Entonces, aparecen sus hermanastras, contando historias pretenciosas sobre el baile, que desembocan, como siempre, en una pelea. El príncipe recorre la aldea buscando a la joven desconocida. Llega a la casa de Cenicienta, donde él y sus amigos son recibidos con grandes honores. Las hermanastras tratan infructuosamente de calzar sus enormes pies en el pequeño zapato y la madrastra, enloquecida, se muestra dispuesta a cortar los pies de sus hijas para que el príncipe tome a una de ellas por esposa. Cenicienta se acerca para ayudar a sus hermanastras pero, sorprendida por la presencia de su amado, deja caer el zapato que guardaba en su delantal. El príncipe insiste en que la joven se pruebe el zapato, y descubre que le calza perfectamente. Confirmando que ella es la hermosa joven que conoció en el baile, decide tomarla por esposa. Las hermanastras le ofrecen sus reverencias a Cenicienta, que las acaricia con afecto y les perdona sus maltratos anteriores. - Escena IV |
Ballet Carmen |
Carmen no es la historia de la mujer fatal, diabólica, coqueta, seductora; como se ha querido interpretarla. Carmen es el concepto de la mujer apasionada, que encuentra en la sociedad que la rodea un marco estrecho de comportamiento. La coreografía y libreto es del maestro cubano Alberto Alonso, sobre la novela de Próspero Merimée (novelista romántico francés). El ballet fue creado por Alonso a pedido de la bailarina rusa Maya Pliseskaya. La música para Carmen, elaborada en principio por Georges Bizet y con los arreglos posteriores de Rodion Schedrin, marido de la bailarina rusa, es de profunda condición expresiva y se pone al servicio de la acción dramática, y al inmenso sentimiento humano. El ballet Carmen tuvo su estreno mundial en el Teatro Bolchoi de Moscú, en 1967. Ballet en un acto dividido en tres escenas. Primera Parte La orquesta tocará el tema del destino, para la entrada alegre y sensual de Carmen, personaje que encierra en sí a la mujer apasionada, con actitudes de franca oposición y desafío a una sociedad estructurada en normas perjudicadas. Carmen, ha escogido a Don José, a quien le tiende un lazo al lanzarle una flor. La música se torna dramática, profunda, para la entrada de un personaje que representa al Destino, lo que da lugar a que la escena se torne extraña, rompiendo la alegría del juego del amor y la sensualidad. Carmen burlona, desdeña los anuncios de la lectura de cartas de la gitana, que presagian días aciagos, que desde ya marcan desconocidos y temerosos destinos. Desde el foro, los gritos acompañan a las cigarreras que vienen peleando, y el centro de la riña, es Carmen, que envuelta en la furia corta el rostro de una de sus compañeras, formándose un tumulto, que es sofocado por la guardia. Carmen es apresada junto a varias de sus compañeras.Utilizando sus encantos y la admiración y debilidad que Don José tiene por ella, aprovecha de esta ventaja, para seducirlo y convencerlo que le permita escapar de la prisión. Don José, entre arrepentido y satisfecho, asume su culpa. Mientras el Destino, que otra vez aparecerá en escena, confirmará sus predicciones. Carmen libre se entrega a Don José. Segunda parte Entrada esperada del torero Escamillo, que ha triunfado en la corrida de la tarde. Carmen, se ha ilusionado con el torero y la entrada de él y su danza reafirman sus sentimientos; pues, el halo de triunfo, fama y fortuna contagian el alma de Carmen. Escamillo baila para ella y ejerce en la protagonista una instantánea seducción. La entrada del Destino, reafirmará, que las cartas están echadas y que Carmen se encuentra en una encrucijada, entre dos caminos: la sensualidad, por el amor y la ternura. Sin embargo, Carmen se encontrará con el sargento Don José y caerán en un torbellino, donde se canta al amor. Súbitamente, el ámbito cambia: una plaza de toros. El triunfo del torero resuena en la plaza. Por un lado Escamillo, que le produce un temblor interior que no acierta a definir y que le ciega ante la realidad; por el otro Don José, que le conduce a la ternura, a la paz interior. Don José, muerde sus celos; mientras el torero, saborea el triunfo. Con la entrada nuevamente del Destino, la muerte aparece en un cuchillo que flamea desde lo alto, se hunde en el pecho, de Carmen. La mano de Carmen acompaña, a la hoja metálica que le quita la vida, buscando el rostro de Don José, que ve morir a su amada. |
Ballet La Hija del Faraón |
"La hija del Faraón" tuvo su premier en el Teatro Mariinsky de St.Petersburgo el 18 de enero de 1862 por el ballet clásico Imperial. La coreografía es del Maestro Marius Petipa, quien fue inspirado por la novela "La Momie de Le Roman " del escritor francés Théophile Gautier. La música fué escrita por César Pugni y la reeconstruccion del ballet, diseño y trajes de la época por Pierre Lacotte. Libreto Vernoy de Saint-Georges y Marius Petipa. Ballet tres actos y nueve escenas. Acto 1: El Sr.Wilson, explorador inglés, se encuentra en un viaje por el Antiguo Egipto junto a su criado. Para refugiarse de una tormenta del desierto, varios comerciantes del lugar, muy amablemente, los conducen hacia el interior de una pirámide, donde antiguamente Aspicia, hija de un Faraón, fue enterrada. Los comerciantes le invitan a fumar opio, y Wilson cae en un sueño profundo. Wilson bajo el efecto del opio sueña que aparece Aspicia y el se transforma en el egipcio TA-Hor. Ambos están enamorados y desean estar juntos. Salen de cazan y comparten su amor. Acto 2 : El Faraón, padre de la princesa, acuerda en un contrato casar Aspicia con el rey de Nubia por razones esencialmente políticas. El día de la boda, TA-Hor se escapa con Aspicia. El Faraón y el rey de Nubia intentan capturar a la novia de las manos de su amante, pero TA-Hor y Aspicia se ocultan en la choza de un pescador en el Nilo. Al día siguiente, TA-Hor sale a pescar y el rey de Nubia llega, intentando llevarse a Aspicia. Ella, antes de irse con el prefiere morir, y el rey de nubia ante su gran rechazo la empuja y ella salta al río Nilo. Cuando TA-Hor vuelven a la choza, el rey lo captura y lo lleva frente al Faraón culpandolo de la tragedia.El dios del Nilo, en el fondo del río, permite que Aspicia no muera y le concede el deseo de ver nuevamente a su amado Ta-Hor. De esta manera, Aspicia es levantado y puesta en la tierra, pues TA-Hor está a punto de ser condenada a muerte por la mordedura de una serpiente venenosa. Acto 3: Aspicia entra en escena e impide la condena. Frente a su padre, culpa al rey de Nubia por causar su salto al río, demostrando la inculpabilidad de su querido y pide a su padre que lance TA-Hor al rio junto a ella. Cuando el Faraón rechazan su pedido, ella intenta tocar la serpiente venenosa.Al ver la reacción de su hija el Faraón se aplaca, concede el deseo y la pareja celebra su amor. El señor Wilson finalmente se despierta con el sarcófago de Aspicia delante y comprende que todo fue un sueño. |
Ballet El Cascanueces |
La obra fue estrenada el 17 de diciembre de 1892, en el legendario teatro Mariinskii de San Petersburgo bajo la coreografía original de Lev Ivanov, el libro de Marius Petipa y la música de Piotr I. Tchaikovsky. La primera historia que se conoce de El Cascanueces está basada en el libro de cuentos de Ernst Theodor Amadeus Hoffmann, titulado: "El Cascanueces y el Rey de los ratones" (1816). Sin embargo, el argumento que daría vida, años más tarde al ballet de Tchaikovsky deriva de una adaptación que Alejandro Dumas (padre) hiciera del texto de Hoffmann. Ballet en dos actos y 5 escenas. Acto I Escena 1 Es Navidad. Entre los invitados que llegan a la casa de la familia Shtalbaun se encuentra Drosselmeier -el preferido por los niños. Impacientes, los pequeños esperan que en el árbol se enciendan las luces de colores. Llega el mago con su regalo para los niños: un teatro de marionetas. La fiesta continúa; los abuelos también bailan superando los achaques propios de su edad mientras los niños juegan. Las marionetas Colombina, Arlequino y Saracinos inician su baile. Todos están muy emocionados cuando el mago se quita su máscara: es Drosselmeier. Clara y Fritz, los hijos de Shtalbaun le piden a Drosselmeier que les regale las marionetas pero éstas ya se las han llevado. En su lugar les regala un ridículo muñeco cascanueces. Fritz arrebata el muñeco a Clara y lo rompe. Ésta le consuela echándole en la cama. Los invitados abandonan la casa después del baile para finalizar la fiesta navideña. Escena 2 Ha anochecido y la habitación donde se encuentra el árbol adquiere un aire misterioso, casi milagroso. Asustada, Clara va a ver a su muñeco enfermo Cascanueces. Melancólica observa como un búho se convierte en Drosselmeier mientras la mira con una sonrisa burlona. A su señal, del suelo aparecen ratones encabezados por su Rey. Clara quiere huir pero las fuerzas la abandonan y sólo consigue acercarse al árbol que muy deprisa empieza a crecer, mientras todo a su alrededor cambia. Los soldados de plomo cobran vida y, encabezados por Cascanueces, inician una batalla contra los ratones. Las fuerzas son desiguales, van venciendo los ratones cuando Cascanueces se queda sólo ante el ejército de roedores. Clara lanza un zapato al Rey de los Ratones y consigue ahuyentarlos. Cascanueces yace en el suelo. Clara se acerca a él: es un joven príncipe. Él la mira agradeciendo su ayuda. Escena 3 La habitación se convierte en un bosque invernal. Unos levísimos copos de nieve bailan milagrosamente mientras una estrella del árbol atrapa a Clara y al Príncipe Cascanueces como en un sueño, introduciéndolos en una carroza que les conducirá hasta la cima del árbol. Acto II Escena 4 Juntos inician su viaje hacia la cima del árbol, pero los ratones les alcanzan entablándose una nueva batalla. En esta ocasión Cascanueces sale vencedor. Llegan al reino de los muñecos donde son recibidos por doce pajes. El Príncipe narra lo sucedido y cuenta como Clara le salvó, motivo por el que todos muestran su agradecimiento, celebrando una gran fiesta en honor de ambos. Se despiden del reino de las Nieves y siguen su camino por el Río de la Limonada hasta llegar al Reino de las Golosinas donde la Reina de los Dulces los espera con un agasajo en su honor en donde varios bailarines de distintas partes del mundo bailan para ellos. Escena 5 Finalmente, el mundo de ensueño de Clara se desvanece y ella se despierta dándose cuenta que todo ha sido un sueño. Sus padres van a buscarla para que salga al portón a despedir a su padrino Drosselmeyer quien junto con Daniel regresa a su taller de relojes y muñecos. |
Ballet Pájaro de Fuego |
En 1909 Sergei Diaghilev, director de los Ballets Rusos, le solicitó al músico ruso Igor Stravinsky la primera obra por encargo de su carrera. Hoy forma parte del gran clásico repertorio ruso. Relato coreográfico en dos partes y siete cuadros. En 1909 Sergei Diaghilev, director de los Ballets Rusos, le solicitó al músico ruso Igor Stravinsky la primera obra por encargo de su carrera: la música para un ballet cuyo tema sería un cuento popular basado en una leyenda folklórica rusa conocido como "El Pájaro de Fuego". El estreno de la obra, como parte de la puesta en escena de Diaghilev, tuvo lugar el 25 de mayo de 1910 en la Ópera de París, con coreografia de Michel Fokin, y resultó un éxito que marcó la presentación de Stravinsky en sociedad. Hoy forma parte del gran clásico repertorio ruso. Relato coreográfico en dos partes y siete cuadros. Argumento A la caza del pájaro de fuego, el príncipe Iván aguarda por la noche cerca del árbol de manzanas de oro. La hermosa ave aparece y revolotea cerca del árbol mientras el príncipe espera y acecha. Finalmente, Iván atrapa al pájaro de fuego, que le pide clemencia. El príncipe se conmueve, le concede la libertad y la criatura mítica le regala una pluma mágica. Las trece princesas encantadas llegan al árbol de manzanas de oro sin ver a Iván, quien pasa inadvertido contemplando su hermosura. Las princesas juegan con los frutos de oro mientras el príncipe se enamora de una de ellas. Iván sale de su escondite ante la sorpresa de las princesas y le pide a su elegida que se acerque, tras lo que se inicia una danza de enamorados. De pronto las princesas se agitan, se despiden y se van precipitadamente, pues está a punto de amanecer. Iván permanece solo y lo encuentran los monstruos guardianes de Kaschei, quienes lo capturan. Llega el malvado semidiós y condena a muerte al príncipe Iván, a pesar de las súplicas de las princesas. Iván recuerda la pluma mágica que tiene en su poder, la saca y el pájaro de fuego aparece. El mítico ser volador encanta a los guardianes de Kaschei y los envuelve en una danza infernal que termina por derrotarlos. El pájaro canta una canción de cuna con la que todos menos Iván son vencidos por el sueño, incluyendo a Kaschei, quien despierta después de un momento. El pájaro de fuego le entrega al príncipe el cofre de acero que contiene el huevo con el alma del malvado semidiós. El príncipe toma el huevo y lo destruye, con lo que acaba con la vida de Kaschei. Los hechizos de Kaschei desaparecen: los doce caballeros petrificados regresan a la vida y las trece doncellas quedan libres del maleficio. Amanece, la alegría los invade a todos y, por fin, Iván y su princesa pueden ser felices. |
Ballet La Bella Durmiente |
La historia de este ballet está basada en el famoso cuento original de Charles Perrault “La Bella Durmiente del Bosque”. La idea original de crear un ballet sobre el cuento de Perrault se debe a I.A. Vsevolojski, entonces Director del Teatro Imperial. Fue estrenada por el Ballet Mariinsky de San Petersbsugo el 16 de enero de 1890. La bella durmiente fue presentada a lo largo de la historia por compañías de ballet de todo el mundo. Vale la pena destacar una de las versiones mas originales, realizada por los Ballets Russes de Serguei Diaghilev en Londres en 1921. Fue la primera vez que este ballet se mostró fuera de Rusia de una manera completa con un gran éxito. El ballet de Marius Petipa y Piotr I. Tchaikovsky "La Bella Durmiente del Bosque" es un ballet en un prólogo y tres actos. Con coreografía de Marius Petipa, libreto de Ivan A. Vsevolojsky y del mismo Petipa y con música de Piotr I. Tchaikovsky, se estrenó en el Teatro Mariinsky de Sant Petersburgo el 3 de enero de 1890. Es considerado hasta la fecha como uno de los ballets más espectaculares y más representativos del Ballet clásico. Prólogo: El Bautismo Es el bautizo de la Princesa Aurora y llegan al palacio las hadas del bosque a regalarle sus dones como la belleza, la generosidad, la elocuencia, el encanto, la alegría, temperamento y finalmente el Hada de las Lilas que le ofrece bondad. Llega al palacio la malvada Hada Carabosse y anuncia que al cumplir Aurora los 16 años se pinchará el dedo y morirá. Por fortuna, el Hada Madrina o Hada de las Lilas que todavía no había dado su bendición, advierte que no puede anular el conjuro de Carabosse pero sí disminuir su poder y por lo tanto, Aurora no morirá sino que caerá en un sueño profundo durante 100 años hasta que un Príncipe la despierte con un beso. Carabosse se marcha furiosa. Primer Acto: El Hechizo Se festeja el cumpleaños 16 de la Princesa Aurora. El Rey le presenta a 4 Príncipes de diferentes partes del mundo que vienen a pedir la mano de la Princesa y bailan con ella el famoso Adagio de la Rosa. Aparece una extraña viejita que regala unas flores a Aurora y luego ella descubre que hay algo dentro; un huso con el que empieza a jugar y bailar hasta que se pincha el dedo. La extraña no es otra que Carabosse disfrazada que rie al ver que el conjuro surte efecto pues Aurora se desploma. Aparece el Hada de las Lilas para cumplir su promesa y toda la corte cae en un profundo sueño. Segundo Acto: La Visión El Príncipe Desiré está de cacería cuando aparece el Hada de las Lilas y le muestra la imagen de Aurora en medio de un bosque lleno de ninfas. El Príncipe se enamora de ella y decide seguir al Hada de las Lilas hasta el palacio donde duerme la princesa y la despierta con un beso. Tercer acto: Las Nupcias Se festejan las bodas de Aurora y Desiré en el palacio real con un “divertissement” donde bailan las Joyas (Rubí, Esmeralda y Zafiro), el Pájaro Azul y la Princesa Florina y también personajes de los cuentos infantiles como el Gato con Botas y la Gatita Blanca y Caperucita Roja y el Lobo Feroz. El ballet termina con el gran pas de deux de Aurora y Desiré seguido de un apoteosis donde se une toda la corte. |
Ballet Romeo y Julieta |
El ballet Romeo y Julieta se desarrolla bajo el marco musical de Sergei Prokofiev. Su primera representación no fue popular, pero después realizó una serie de cambios que hizo que se convirtiera en un verdadero éxito, para que luego sea interpretada por numerosos coreógrafos. Desde 1935, el escenógrafo Radlov había planeado con Prokofiev la realización escénica del ballet. Sin embargo, hubo que esperar cinco años para su presentación pública, la cual tuvo lugar en Leningrado, el 11 de enero de 1940. Siguiendo su costumbre, Prokofiev resolvió el obstáculo de las presentaciones escénicas componiendo tres suites sinfónicas con música del ballet, las dos primeras en 1935 y la tercera, diez años más tarde. Las primeras dos suites se estrenaron en Moscú y Leningrado, respectivamente, en 1935 y 1937. De todas, la Segunda Suite es la más popular. Existen varias versiones como las creadas por los bailarines y corógrafos Anthony Tudor, Frederick Ashton, Rudy Van Dantzig, Oleg Vinogradov, John Neumeier, Maurice Bejart, Heinz Spoerli, Rudolph Nureyev. Acto I Escena 1. Una plaza de Verona a principios de siglo XVI al amanecer. Romeo se encuentra con sus amigos quienes tratan de rescatarlo de su melancólico estado de ánimo. Teobaldo, al ver a Romeo busca pelea con él, renovando así el rencor entre las familias Montesco y Capuleto. Escena 2: En la casa de los Capuleto. La casa está en plena preparación para un baile. Julieta juega con su nodriza quien trata de hacerle entender que ya no es una niña. Lady y Lord Capuleto le presentan a Julieta a Paris, quien la quiere como esposa. En el baile Julieta conoce a Romeo. Escena 3: En la puerta de la casa de los Capuleto. Muy pensativa Julieta está en su balcón reflexionando, mientras descubre a Romeo quien la espera escondido entre las sombras del jardín. Ambos descubren su sentimiento y sienten que es tan puro que pueden enfrentar cualquier peligro. Acto II Escena 1: La plaza, en la tarde. El pueblo está celebrando. Romeo está en la plaza con sus amigos; sin embargo, Mercuccio y Benvolio se muestran decepcionados ante el estado de ánimo distante de Romeo. La nodriza de Julieta se acerca hasta la plaza para hacerle entrega a Romeo de una carta en la cual Julieta le escribe que su padre confesor: Fray Lorenzo, los espera en la capilla para casarlos en secreto. Escena 2: La Capilla. Romeo le pide a Fray Lorenzo que lo case con Julieta. Después de la ceremonia Julieta debe regresar sin Romeo a la casa de sus padres. Escena 3: La Plaza al atardecer. El festejo del pueblo llega a su cumbre. Teobaldo, buscando venganza por la intrusión de Romeo en el baile de los Capuleto, pelea con Mercuccio, el mejor amigo de Romeo. Éste, quien ahora tiene parentesco con Teobaldo trata de interceder; sin embargo, Teobaldo, mata a Mercuccio. Enloquecido por la furia causada por la pérdida de su amigo, Romeo termina matando a Teobaldo. Acto III Escena 1: La habitación de Julieta. Romeo, desterrado de Verona por haber matado a Teobaldo, ha pasado la noche nupcial con Julieta. Al amanecer, los Capuleto han decidido que Julieta se casará con Paris lo más pronto posible. Julieta desesperadamente, trata de hacerles cambiar de decisión. Al llegar la noche, se va de su casa para rogarle a Fray Lorenzo su ayuda. Escena 2: La capilla. Fray Lorenzo le entrega a Julieta una poción. Le explica que le hará parecer como si estuviera muerta. Después del entierro, se despertará en el mausoleo de los Capuleto en donde será rescatada por Romeo, quien será avisado del plan por Fray Lorenzo. Escena 3: La habitación de Julieta. Al llegar a la casa, Julieta disimula ceder al plan de casarse con Paris. Cuando la dejan sola, bebe la poción y cae sobre su cama. Más tarde, mientras están en plena preparación para la boda la familia la encuentra "sin vida". Escena 4: La tumba de los Capuleto. Romeo no habiendo recibido el mensaje de Fray Lorenzo ha vuelto en secreto a Verona. Creyendo a Julieta muerta, se quita la vida. Julieta despierta y encuentra a su amado. Ella decide seguir a Romeo a una vida donde nadie los podrá separar. |
Ballet El Lago de los Cisnes |
El Lago de los cisnes es uno de los ballets clásicos tradicionales más conocidos en todo el mundo. Se estrenó en el Teatro Bolshoi de Moscú en 1877 y para 1895 con una nueva concepción de Marius Petipa y Lev Ivanov, con lo que logró un gran éxito en el Teatro Marinsky de San Petersburgo, El lago de los cisnes es sin duda el ballet más popular a lo largo de la historia. La obra transcurre entre el amor y la magia, enlazando en sus cuadros la eterna lucha del bien y del mal. La protagonizan el príncipe Sigfrido, enamorado de Odette, joven convertida en cisne por el hechizo del malvado Von Rothbart y Odile el cisne negro e hija del brujo. Coreografía de Marius Petipa y Lev Ivanov. Música Pitr Ilich Tchaikovsky. Libreto de Vladimir Beghitchev / Vasili Geletzer. Primer acto (El jardín del castillo del príncipe Sigfrido) Es el vigésimo primer cumpleaños de Sigfrido, y el joven príncipe está celebrando la ocasión en el jardín de su palacio. Jóvenes de los estados de alrededor han venido a rendirle tributo. Cuando todos empiezan a divertirse en la fiesta, el buen humor es perturbado por la entrada de la Reina y sus damas de honor. Ella observa a sus amigos con considerable desdén. Sigfrido se altera cuando su madre le señala que debe escoger pronto una esposa. Su indicación, en el fondo, es una orden, y Sigfrido la rechaza obstinadamente. Mañana por la noche, su cumpleaños se celebrará formalmente con un baile en la corte, y allí, entre las más hermosas damas de la comarca, debe escoger a su futura esposa. Sigfrido ve que toda discusión es imposible y parece que se somete a su voluntad. El Bufón, intenta restaurar el espíritu de la feliz ocasión. La noche comienza a caer. El Bufón, su amigo, sabe que Sigfrido debe distraerse en lo que queda de la velada. Oye el sonido de alas agitadas por encima, mira hacia arriba y ve en el cielo hermosos cisnes salvajes en pleno vuelo. El Bufón sugiere que el príncipe forme una partida de caza y vaya en busca de los cisnes. Sigfrido accede. Segundo acto (La orilla del lago) La partida de caza comienza. A una pequeña distancia de ellos, se están deslizando plácidamente los cisnes. Conduciendo al grupo de cisnes hay una hermosa ave. El príncipe camina a lo largo de la orilla del lago hacia los cisnes; cuando está a punto de seguirlos ve algo en la distancia que le hace vacilar. Se para cerca de la orilla, luego se retira rápidamente a través del claro para esconderse. Ha visto algo tan extraño y extraordinario que debe observarlo detenidamente en secreto. Apenas se ha escondido, entra en el claro la más hermosa mujer que nunca ha visto. No puede creer lo que ven sus ojos, puesto que la joven parece ser a la vez cisne y mujer. Su hermosa cara está enmarcada por plumas de cisne, que se unen a su pelo. Su vestido, puro y blanco está embellecido con suaves plumas de cisne, y en su cabeza descansa la corona de la Reina de los Cisnes. La joven piensa que está sola y aterrorizada, todo su cuerpo tiembla, sus brazos se aprietan contra su pecho en una actitud, casi desvalida, de autoprotección; retrocede ante el príncipe, moviéndose frenéticamente, hasta el punto de caer desesperadamente al suelo. El príncipe, ya enamorado, le ruega que no se marche volando y ante su miedo el príncipe le indica que nunca le disparará, que la protegerá. Ella es Odette. El príncipe la saluda y dice que la honrará, pero le pregunta, que ¿a qué se debe que sea la Reina de los Cisnes? El lago, le explica, fue hecho con las lágrimas de su madre. Su madre lloraba porque un hechicero malvado, Von Rotbart, convirtió a su hija en la Reina Cisne. Y seguirá siendo cisne, excepto entre la media noche y el amanecer, a no ser que un hombre la ame, se case con ella, y le sea fiel. Sigfrido apoya las manos en su corazón y le dice que la ama, que se casará con ella y que nunca amará a otra, y promete su fidelidad. Ahora, indignado por el destino de su amor, quiere saber dónde se esconde Von Rotbart. Justo en este momento, el mago aparece a la orilla del lago. Su cara parecida a la de un búho es una odiosa máscara, tiende sus garras haciendo señas para que Odette vuelva a él. Von Rotbart señala amenazadoramente a Sigfrido. Odette se mueve entre ellos, suplicando piedad a Von Rotbart. El príncipe le dice que debe ir la próxima noche al baile de palacio. Acaba de cumplir la mayoría de edad y debe casarse, y en el baile debe escoger a su novia. Odette le replica que no puede ir al baile hasta que no se case -hasta que Von Rotbart no deje de tener poder sobre ella- de otro modo el hechicero la descubriría y su amor peligraría. Cuando los amantes han dejado el claro, las huestes de Odette, todos los cisnes que, como ella misma, asumen forma humana sólo en las horas entre la medianoche y el amanecer, entran bailando desde la orilla del lago. Tercer acto: (El gran salón del castillo del príncipe Sigfrido) El baile está a punto de comenzar.Embajadores de tierras extranjeras, ataviados con sus brillantes trajes nativos, han llegado a rendir tributo al príncipe en su cumpleaños. Se anuncia la llegada de cinco hermosas muchachas, invitadas por la Reina como posibles novias para su hijo. Sigfrido, piensa sólo en el claro a la orilla del lago y en su encuentro con Odette. Su madre le inquiere a que baile con sus invitadas. Baila de forma automática e indiferente y se sume en una profunda melancolía. Un heraldo se apresura a informar a la Reina de que una extraña pareja ha llegado. No sabe quiénes son, pero manifiesta que la mujer posee una extraordinaria belleza. Un caballero alto y con barba entra con su hija. Cuando el caballero se presenta a si mismo y a su hija Odile, a la Reina. Sigfrido -perturbado casi hasta perder el control mira fijamente a la hermosa joven. Está vestida de sobrio negro, pero es la viva imagen de su querida Odette. Se trata de Von Rotbart, que se ha transformado a si mismo y a su fingida hija para engañarlo y rompa la promesa hecha a Odette de que nunca amará a otra. La Reina tiene ahora esperanzas de que su hijo se case con una dama de rango, como Odile aparenta ser, e invita a Von Rorbart a sentarse a su lado en el estrado. Odile ha logrado enamorar a Sigfrido y éste piensa que no es otra que Odette. Mientras bailan los dos jóvenes Odette se deja ver en la distancia y hace señales a Sigfrido de que si continúa en esa actitud puede ser fatal para ella. Luego, Sigfrido se aproxima a Von Rotbart y pide la mano de Odile y éste da inmediatamente su consentimiento. En ese momento hay un estrépito de trueno. La sala de baile se oscurece. Rápidos destellos de luz muestran a los asustados cortesanos abandonando el salón de baile, a la princesa madre aturdida, y a Van Rotbart y Odile de pie ante el príncipe en triunfo final de autorrevelación. Sigfrido no puede soportar sus risas odiosas y crueles, y se vuelve para ver en la distancia la patética figura de Odette. Buscándole desesperadamente, con su cuerpo agitado por los sollozos. Cae al suelo atormentado por su falta. Acto cuarto (La orilla del lago) Las doncellas cisne se han agrupado a la orilla del lago. Cuando aparece llorando, intentan consolarla. Le recuerdan que Sigfrido es solo un humano, que podría no haber conocido el hechizo, y podría no haber sospechado del plan de Von Rotbart. Sigfrido entra corriendo en el claro y busca frenéticamente a Odette entre los cisnes. Le toma entre sus brazos, pidiéndole que le perdone y jurándole su amor infinito. Odette le perdona pero le dice que no sirve para nada, pues su perdón se corresponde con su muerte. Cuando aparece Von Rotbart, Sigfrido le desafía, quien tras la lucha, es vencido por la fuerza del amor del príncipe a Odette. |
ballet Sylvia |
Sylvia ou La Nymphe de Diane (del francés: Sylvia o la ninfa de Diana) es un ballet a gran escala en tres actos, con coreografía de Louis Mérante y música de Léo Delibes, estrenado en 1876. Jules Barbier y el Barón de Reinach la adaptaron para la Ópera de París. Delibes realizó un arreglo del ballet para piano en 1876 y una suite orquestal basada en números del mismo se estrenó en 1880. Los orígenes del ballet se encuentran en el poema Aminta (1573) de Torquato Tasso que describe la trama básica usada en la obra. Cuando Sylvia fue estrenada el 14 de junio de 1876 en el Palais Garnier, fue ignorada ampliamente. De hecho, las primeras siete producciones de Sylvia no tuvieron éxito. Fue con su recuperación en 1952, con una coreografía nueva de Sir Frederick Ashton, que se popularizó. La exitosa puesta en escena de Ashton se usó en las producciones de 1997, 2004 y 2005, y casi todas están basadas en su coreografía de 1952. La partitura de Sylvia es variada y rica, y sobresale, poniendo la atención en la escenografía, los bailarines y el vestuario. En lugar de permanecer al fondo, dando solamente un carácter y un modo, la partitura de Delibes lleva la acción. La música de Sylvia fue también notable por su uso novedoso y más desarrollado del leitmotif. Tal opción estilística era característica de Delibes. Los orígenes del ballet se encuentran en el poema Aminta (1573) de Torquato Tasso que describe la trama básica usada en la obra. Jules Barbier y el Barón de Reinach la adaptaron para la Ópera de París. Delibes realizó un arreglo del ballet para piano en 1876 y una suite orquestal basada en números del mismo se estrenó en 1880 en París. Papeles principales:
Acto I: Un bosque sagrado El ballet comienza con una escena de adoración en la que las criaturas del bosque danzan ante el dios del amor, Eros. Aminta, un humilde pastor, tropieza con ellas, interrumpiendo su ritual. Entonces Sylvia, objeto de deseo de Aminta, llega a escena junto a su pandilla de cazadoras para burlarse de Eros. Aminta procura esconderse, pero Sylvia descubre a su acosador e, irritada, dispara su arco hacia Eros. Aminta protege a la deidad y por ello queda herido. En respuesta Eros dispara a Sylvia, quien queda herida, no gravemente, pero lo suficiente como para ser conducida fuera de escena. Entonces también se nos revela un cazador, Orión, que observa a Sylvia, y se le ve celebrando cuando Aminta queda inconsciente. Se oculta nuevamente cuando vuelve Sylvia; esta vez ella es comprensiva con Aminta. Mientras que las cazadoras se lamentan por su víctima, Sylvia es secuestrada por Orión. Los campesinos se afligen por Aminta hasta que un disimulado Eros restablece al pastor. Entonces Eros revela su verdadera identidad e informa a Aminta acerca de las acciones de Orión. Acto II: Una cueva en la Isla de Orión Cautiva y oculta en la isla de Orión, Sylvia es tentada por éste con joyas y vino, todo inútilmente. Ahora, Sylvia se aflige por Aminta, acariciando nostálgicamente la flecha que le disparó al pecho. Cuando Orión se la arrebata, Sylvia logra que su captor se embriague hasta quedar inconsciente, recupera su flecha y ruega a Eros por ayuda. Las invocaciones de Sylvia no son vanas, pues rápidamente llega Eros y revela a la implorante una visión de Aminta esperándola. El dúo parte hacia el templo de Diana, donde el amor de Sylvia la aguarda fervientemente. Acto III: La costa marítima cerca del Templo de Diana Aminta llega al templo de Diana donde se encuentra la celebración de una bacanal pero no a Sylvia, que pronto llegará con Eros. Después de algunos momentos llenos de júbilo en la reunión, aparece Orión, buscando a Sylvia. Éste lucha con Aminta; Sylvia se oculta en la capilla de Diana y Orión trata de perseguirla. Diana, la diosa de la caza, ultrajada por el atrevimiento, golpea violentamente a Orión y prohíbe la reunión de Aminta y de Sylvia. Entonces el compasivo Eros ofrece a Diana una visión: La diosa recuerda su amor pasado por el joven Endimión, que también era un pastor. Entonces, Diana cambia de sentimientos y abroga su decreto. Así, Aminta y Sylvia se unen bajo la buena voluntad de las deidades. |